Nota: este post trata de las obligaciones fiscales e impuestos sobre ventas de ecommerce en España, pero puede proporcionar una idea general de los requisitos para tiendas online internacionales.
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Existen riesgos ineludibles a la hora de emprender, pero las cuestiones fiscales y tributarias no tienen por qué ser uno de ellos. Antes de poner en marcha un negocio online, es importante que te familiarices con las obligaciones y requisitos legales, como el régimen fiscal para vender por Internet o los impuestos sobre ventas de ecommerce en España.
Estudiar a fondo estas condiciones te permitirá hacerte una idea de cuál será la rentabilidad real de tu negocio y de si tendrás demanda suficiente para que sea rentable. También te ayudará a llevar un control más exhaustivo de tu contabilidad, a fijar el precio de tus productos y a establecer un presupuesto para tus compras.
En los siguientes apartados encontrarás la información esencial para hacer frente a los impuestos sobre ventas en España, pero no dudes en consultar fuentes oficiales para obtener información más actualizada al respecto.
¿Qué son los impuestos sobre ventas de ecommerce?
Los impuestos sobre las ventas de ecommerce son un gravamen que los vendedores cobran a los clientes por cada artículo que venden. Aunque de forma estricta tu negocio online no disponga de una localización física, si la empresa opera desde España y, por lo tanto, tiene su domicilio fiscal en este país, deberá cumplir con las leyes nacionales en materia de fiscalidad.
El impuesto sobre las ventas de ecommerce que se aplica en España es el mismo que se aplica en cualquier negocio físico: el IVA (en el caso de operaciones en la península) y el IGIC (en ventas desde Canarias).
Además, existen tres tipos de IVA que varían según el producto al que se aplica: general, reducido y superreducido. Desde el 1 de julio de 2021, todas las compras online están obligadas a incluir el pago del IVA, con independencia del valor o el importe de la compra.
¿Por qué es importante pagar los impuestos sobre las ventas de ecommerce?
Estos impuestos suponen un valor añadido sobre el precio de venta que se recauda con cada transacción. Las cantidades deben ser transferidas a Hacienda en los plazos estipulados para evitar sanciones y recargos.
El pago de los impuestos sobre las ventas de ecommerce es también un modo de garantizar las relaciones óptimas con clientes y proveedores, consolidando la buena reputación de tu marca.
Existe una mayor predisposición por parte de clientes y proveedores a trabajar con empresas que cumplen con sus obligaciones legales y tributarias, facilitando que el sistema funcione en beneficio de todos. Trabajar con empresas honestas que pagan sus impuestos es también una garantía de seguridad.
Por último, la recaudación de impuestos contribuye al crecimiento socioeconómico del país y permite realizar mejoras que repercuten en la calidad de vida de toda la población.
¿Cuál es el régimen fiscal de las tiendas online en España?
Al darte de alta en Hacienda para iniciar tu actividad comercial online, la Administración te asigna un código IAE (Impuesto de Actividades Económicas) que especifica el régimen fiscal en el que estás incluido. Este régimen fiscal determinará los impuestos que debes pagar y los plazos para hacerlo.
Los tres tipos de regímenes fiscales aplicables a las tiendas online son:
- Régimen general de IVA: aplicable a la mayoría de las ventas online dentro del territorio español. El IVA recaudado se liquida periódicamente (declaraciones trimestrales obligatorias). Es el régimen al que están inscritos la mayoría de los autónomos.
- Régimen de recargo de equivalencia: aplicable a minoristas que compran y venden productos sin transformarlos de manera significativa. Se paga un recargo adicional en la compra y es el proveedor el que lo ingresa, simplificando la gestión del IVA. Es uno de los regímenes más extendidos entre las tiendas online.
- Régimen simplificado de IVA: es un régimen basado en estimaciones que permiten calcular cuál será el IVA que deban pagar autónomos y empresas online. Funciona por módulos y simplifica la carga fiscal, pero no es compatible con todas las actividades.
Impuestos sobre ventas de ecommerce: ¿qué IVA pagan las tiendas online?
Si, como la mayoría de las tiendas online, tu negocio se acoge al régimen de recargo por equivalencia, no tendrás que hacer ingreso alguno de impuesto de ventas por la actividad. Es decir, no tendrás que presentar declaraciones de IVA periódicas ante la Agencia Tributaria.
En lugar de eso, tu proveedor incluirá un recargo de equivalencia en la factura que te emita, diferenciando el IVA repercutido del recargo para incluirlo él en sus declaraciones de IVA. Cuando vendas los productos en tu tienda online, aplicarás el IVA normal que corresponda, pero ya no tendrás que transferirlo a Hacienda.
¿Cuánto supone el recargo de equivalencia?
No todos los productos tienen el mismo tipo impositivo (IVA o IGIC) y tampoco se les aplica el mismo recargo de equivalencia. Estos son los tipos y recargos que establece la Agencia Tributaria:
Facturas en la península
- Artículos de tipo general (ropa, calzado, electrodomésticos, electrónica…): IVA del 21 % y recargo del 5,2 %.
- Artículos de tipo reducido (comida, flores, entradas de espectáculos, artículos de higiene…): IVA del 10 % y recargo del 1,4 %.
- Artículos de tipo superreducido (libros, revistas, cuadernos, alimentos básicos…): IVA del 4 % y recargo del 0,5 %.
Facturas en Canarias
Los tipos impositivos en Canarias tienen otra estructura, y el recargo de equivalencia se aplica ajustándose a dichas particularidades:
- IGIC del 0 %: no se aplica recargo
- IGIC del 3 %: recargo del 0,3 %
- IGIC del 7 %: recargo del 0,7 %
- IGIC del 9,5 %: recargo del 0,9 %
- IGIC del 13,5 %: recargo del 1,35 %
- IGIC del 20 %: recargo del 2 %
¿Te haces un lío con tanto número? Es mucho más fácil de lo que parece. Aquí tienes un ejemplo práctico para que lo entiendas mejor.
- Base imponible: 100 euros – IVA 21 %: 21 euros
- Recargo de equivalencia: 5,2 % = 5,2 euros
- Total que tendrás que pagar a tu proveedor: 126,29 euros.
Ventajas del recargo de equivalencia
A la hora de hacer tus declaraciones trimestrales, te ahorrarás el engorro que supone declarar todo el dinero que has recaudado en concepto de IVA en cada una de tus ventas. Tampoco tendrás que transferir ninguna cantidad a Hacienda porque eso es responsabilidad del proveedor que te ha facturado con el recargo correspondiente.
Desventajas del recargo de equivalencia
No podrás deducirte el IVA de tus compras por lo que, inicialmente, estarás pagando más. Para rentabilizar tus compras, tendrás que vender más productos.
En cualquier caso, si este régimen fiscal no te convence, puedes adscribirte a otro. Por ejemplo, si en lugar de trabajar como autónomo formas una sociedad mercantil, podrás deducirte el IVA de todas las compras que hagas para vender en tu tienda online, así como otros gastos. Si tienes idea de realizar una inversión considerable, esta es una alternativa que deberías considerar.
¿Qué pasa con las compras a proveedores no españoles?
Es probable que, por cuestiones de precio o de disponibilidad de mercancía, te interese trabajar con proveedores internacionales. En estos casos deberás controlar los impuestos sobre las ventas de ecommerce teniendo en cuenta estas dos categorías:
Proveedores incluidos en la Unión Europea
Como tus proveedores son extranjeros y no tienen obligación de comunicarse con la Hacienda española, serás tú quien gestione el ingreso del IVA y del recargo de equivalencia. Es lo que se conoce como “inversión del sujeto pasivo”.
Deberás autoliquidar el IVA en tus declaraciones trimestrales como si hubieras vendido los productos tú mismo y presentar los modelos pertinentes (operaciones intracomunitarias). Esto también sucede al comprar a proveedores con domicilio fiscal en Canarias, al considerarse una importación.
Proveedores no incluidos en la Unión Europea
Cuando compras fuera de la Unión Europea, (p. ej. a China o a EE. UU.), el sistema es similar. Solo que aparte de pagar tú el IVA de importación, es probable que debas asumir otros gastos por las gestiones aduaneras. Será también en los trámites aduaneros cuando abones el recargo de equivalencia correspondiente en caso de que estés adscrito a este régimen fiscal.
¿Cómo pago el IRPF si tengo una tienda online?
Tengas o no obligación de declarar el IVA en tus autoliquidaciones trimestrales como autónomo, sí estarás obligado a informar sobre tus ingresos a Hacienda cada tres meses (modelos 130) y a presentar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) una vez año.
En el caso de que ejerzas tu actividad como sociedad (persona jurídica), deberás cumplir con las obligaciones fiscales aplicables a empresas, siendo la más importante la del impuesto de sociedades (anual).
Buenas prácticas para cumplir con los impuestos sobre las ventas de ecommerce
- Informa a tus proveedores si estás adscrito o no al régimen fiscal como vendedor minorista para que te aplique el recargo de equivalencia en las facturas.
- Mantente informado sobre eventuales cambios en materia fiscal y posibles exenciones de impuestos o bonificaciones de las que puedas beneficiarte (lo mejor es asesorarse con expertos en la materia).
- Descárgate el calendario del contribuyente y créate alertas para tener listas las autoliquidaciones en tiempo y forma.
- Valora la posibilidad de automatizar la contabilidad y el pago de impuestos sobre las ventas de ecommerce mediante el uso de un software de gestión. Evitarás errores y sanciones.
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Preguntas frecuentes sobre impuestos de ventas de ecommerce
¿Qué son los impuestos sobre las ventas de ecommerce?
Es el gravamen que los vendedores cobran a los compradores (IVA o IGIC) por cada artículo vendido. Se declara de forma periódica y se transfiere a Hacienda como cualquier otro impuesto.
¿Quiénes están obligados a pagar los impuestos sobre las ventas de ecommerce?
Todas las personas físicas o jurídicas con domicilio fiscal en España que realicen operaciones comerciales dentro o fuera del territorio nacional.
¿A qué régimen fiscal están adscritas las tiendas online?
Las tiendas online pueden operar en regímenes fiscales diferentes: general, recargo de equivalencia o simplificado. Cada uno de ello implica el cumplimiento de unas determinadas obligaciones tributarias.
¿Cómo se calcula el recargo de equivalencia?
Se trata de un porcentaje variable que se aplica en función del tipo de IVA o IGIC. Es una cantidad que debe pagar el vendedor minorista a su proveedor, y es este último el responsable de declararlo.
¿Varía el IRPF por ser una tienda online?
No. Como trabajador autónomo estás obligado a informar a Hacienda de tus ingresos de manera trimestral, presentando el modelo 130, y anualmente a través de la declaración del IRPF. En el caso de sociedades (personas jurídicas), deberás presentar el impuesto de sociedades.